Producciones Imperdibles vuelve al
Palacio Marqueses de La Algaba un verano más para volver a encontrarse con el
público sevillano que, desde hace años, sigue sus espectáculos estivales.
Este año han querido hacer un guiño y
plantear un espectáculo muy diferente a lo hecho hasta ahora. Sin abandonar la
comedia, se adentran en el mundo de la mujer a través de uno de los textos más
celebrados y representados de los últimos años. Una obra dramática creada a
partir de las entrevistas realizadas por la autora a mas de 250 mujeres de toda
condición y que tienen como denominador común la vagina y todo lo que de
símbolo y realidad femenina representa,
ya sea a través del sexo, el amor, la violación, la menstruación, la
mutilación, la masturbación, el nacimiento, el orgasmo y la variedad de nombres
para la vagina, o simplemente como un aspecto físico del cuerpo.
En la puesta en escena, la intención ha
sido teatralizar e incluso dialogar algunos de esos monólogos buscando una
dinámica con mucho ritmo escénico, a modo de “montaña rusa”, entre los textos,
digamos, más “divertidos” y los que tienen una mayor carga dramática.
Además del valor documental, los textos
de Eve Ensler rebosan de poesía, valentía, ironía y cierta comicidad que
impregnan un compromiso humano más allá de la propia reivindicación de género.
MONÓLOGOS DE LA VAGINA
Eve Ensler escribió la primera versión de
esta obra en 1996, después de entrevistar a más de 200 mujeres acerca del sexo,
las relaciones amorosas y la violencia doméstica.
Monólogos de la Vagina se estrenó el 3 de
octubre de 1996 en Nueva York. Originalmente incluía una sola actriz: la propia
autora que le daba vida a una docena de personajes relatando sus historias. La
edad, actitud y estado de ánimo de los personajes varía, pero todos los
monólogos están relacionados con la vagina, ya sea por tratarse de la
sexualidad, la menstruación, la masturbación, el orgasmo, el parto, la
violación o la mutilación genital.
A lo largo del tiempo y en todas las
culturas del mundo, el poder de las mujeres ha estado vinculado a su sexualidad
y a su habilidad de parir hijos. Por esto, Eve Ensler considera que la vagina
puede ser un instrumento de poder.
A partir de 1998 la obra pasa a convertirse
en un movimiento en contra de la violencia de género.
En Estados Unidos la popularidad de la
obra llegó a tales niveles que en el año 2001 abarrotó, con la actuación de
varias artistas famosas, el cupo de 18,000 asientos del Madison Square Garden.
La obra ha sido traducida a más de 45
idiomas y llevada al escenario en casi 120 países.
LA OBRA
Monólogos de la Vagina está formada por
un número de monólogos interpretados por mujeres.
En un principio, Eve Ensler realizó cada
monólogo ella misma, con actuaciones posteriores de tres actrices, y las
versiones más recientes con una actriz diferente para cada función.
En esta versión de Imperdibles los
monólogos los interpretan dos actrices de reconocido prestigio y amplia
trayectoria.
Cada monólogo de alguna manera se
relaciona con la vagina, ya sea a través del sexo, el amor, la violación, la
menstruación, la mutilación, la masturbación, el nacimiento, el orgasmo y la
variedad de nombres para la vagina, o simplemente como un aspecto físico del
cuerpo. Un tema recurrente en toda la pieza es la vagina como un instrumento de
poder femenino, y la última encarnación de la individualidad.